En un auditorio donde se dio cita el sector español del marketing y la comunicación política, Javier Fernández ejerció como invitado de honor y representante institucional para la entrega de los primeros premios organizados por la Asociación de Comunicación Política, que eligió la ciudad de Sevilla como sede para dicho evento.

De entrada, el presidente de la entidad provincial se mostró ‘agradecido’ por el hecho de que la primera gala ACOP tuviera como escenario Sevilla’, para a continuación referirse a que ‘hay gente maravillosa haciendo cosas maravillosas en los ámbitos político, social y cultural, pero hay veces que esas cosas hay que empaquetarlas’, en clara referencia a la labor que desarrollan los comunicadores de campañas políticas e institucionales.

Continuó Fernández diciendo que en las dos disciplinas que se conjugaban en la gala, comunicación y política, había cosas en común, como que ‘la política es útil si sirve a la gente y la comunicación es útil si sirve a la verdad. Una política que sea capaz de cambiarle la vida a la gente y que tenga un fondo basado en la búsqueda de la igualdad de oportunidades, porque es importante que la gente tenga la certeza de que hay opciones políticas que luchan por que tengan oportunidades de futuro’.

Como reflexión general, el presidente de la Diputación arguyó que ‘la paz no es el estado normal de las cosas y, por eso, tenemos que construir entre todos cultura de paz. Una cultura que nos permita vivir mejor, porque dentro de 20 años la guerra será entre la verdad y la mentira y, ante eso, comunicación y política tenemos que compartir la responsabilidad de que prevalezca lo útil y la verdad’.

Premios a grandes trabajos

Fueron seis los galardones que se entregaron por parte de ACOP en esta primera gala. Concretamente, el Premio Mejor Tesis Doctoral recayó sobre María Díez Garrido, de la Universidad de Valladolid, por su trabajo ”La transparencia en los partidos políticos como estrategia comunicativa”, al que se le valoró especialmente la transferencia de conocimiento de cómo los partidos se exponen a la ventana mediática y se abren a los organismos fiscalizadores.

La mejor campaña municipal fue ‘Con Paco gana Málaga’, de Jesús Espino, coordinador general de comunicación del Ayuntamiento de Málaga y profesor universitario, que agradeció en el acto a todas y todos los que participaron en la campaña ‘que no fue flor de quince días sino de muchos meses de planificación». Por otra parte, reivindicó «la política y los partidos, y a todos los consultores que trabajan por el bien común”.

Como mejor campaña electoral en el ámbito autonómico se alzó con la distinción la campaña ‘Castilla La Mancha. En buenas manos’, de Sergio Gutiérrez, que afirmó que arriesgaron ‘por hacer una campaña de emociones en positivo; desde el corazón y no desde las entrañas’.

La mejor campaña gubernamental fue para ‘Andalusian Crush’, de Ogilvy-Junta de Andalucía. En este apartado, desde la administración autonómica indicaron que “era un reto conquistar el mercado de larga distancia y esta campaña nos ha posicionado en todo el mundo”.

EL reconocimiento a mejor campaña electoral en digital fue para ‘Elecciones a la Diputación Foral de Bizkaia. Podemos’. El artífice de la misma, Unai Berrugete Alonso, muy emocionado, solo acertó a dar las gracias a un público que disfrutó visualizando esta iniciativa.

Finalmente, el Premio de Honor fue para José Antonio Llorente de LLYC, ‘una de las figuras más relevantes del sector de la comunicación en los últimos 30 años, visionario y gran empresario; y sobretodo muy generoso, una de las grandes cualidades de un gran líder. Igualmente hubo un recuerdo especial para Miguel Barroso, recientemente fallecido.