El presidente de la Diputación de Sevilla y de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), Fernando Rodríguez Villalobos, junto a la consejera de Educación de la Junta de Andalucía, Adelaida de la Calle, ha participado esta mañana en la entrega de los premios Educaciudad 2015 a los municipios comprometidos con la educación , un acto celebrado en el Museo Casa de la Ciencia, en el Pabellón de Perú.

Los diez municipios premiados en esta edición han sido Chauchina, de Granada; Dos Torres, de la provincia de Córdoba; Cuevas de Almanzora y Rioja, de Almería; Pizarra, de Málaga; Chiclana de la Frontera, de Cádiz; Carmona, Castilleja de Guzmán y Las Cabezas de San Juan de Sevilla; y Jódar, de Jaén.

Villalobos ha recordado que la enseñanza ha sido su gran vocación, “el sueño por el que aposté en mi carrera profesional y el de enseñar a las generaciones venideras. Por eso deseo arrancar con unas palabras del crítico y escritor británico John Ruskin: educar a un niño no es hacerle aprender algo que no sabía, sino hacer de él alguien que no existía. La iniciativa EducaCiudad, de la que hoy entregamos los premios, pretende hacer de la persona, del niño, del adolescente, alguien que no existía y convertirlo, en definitiva, en ciudadano”.

Para el mandatario provincial, 'ese es el verdadero calado de Educaciudad, y de iniciativas parecidas como Parlamento Joven, que llevamos años desplegando desde la Diputación de Sevilla. Educar en valores y, en momentos como este, reconocerlo a los que vienen empujando con firmeza.'

Villalobos ha felicitado a todos los premiados porque “siendo como soy enseñante de vocación y trabajando además en el lado de la política, tengo la certeza de que este tipo de premios aceleran el crecimiento en valores de nuestra sociedad, promoviendo la formación de personas y de sus valores humanísticos que son primordiales para la generación de ciudadanos activos y comprometidos con su tiempo y con su entorno”.

El regidor provincial ha añadido que “estos premios promueven el compromiso no sólo de los educadores en las escuelas, sino de la totalidad de la tribu, como diría el profesor y filósofo José Antonio Marina. Una tribu formada por la familia y el resto de la sociedad, que acompaña al niño, a la niña, en su evolución hacia la edad adulta. Hasta ese momento en el que comprende la necesidad de ofrecer su propio compromiso para el desarrollo, el progreso y la justicia social que mejoran a las sociedades; esto será fruto del nivel de compromiso que ha respirado en su entorno”. Finalmente, Villalobos ha concluido que con “estos premios extraemos el mejor perfil de la ciudadanía y del futuro de nuestros pueblos”.