Son: Vicente, José Julio, Pablo, Diego, Francisco, María Teresa, Teresa, Noelia, Víctor, Silvia, José Luis y Gerardo. 12 hombres y mujeres, de entre 18 y 35 años, que se incorporan desde hoy a los profesionales que integran la Diputación de Sevilla, para desarrollar su labor en colaboración con la plantilla del personal, becados por esta Institución.

Todos y todas tienen en común llegar a la Corporación hispalense de la mano de tres entidades sin ánimo de lucro -las asociaciones Albatros y Aspanri-Aspanridown y la Fundación Albatros-, a través de una convocatoria pública, haber pasado un proceso de selección muy cuidado y exigente y contar con capacidades intelectuales diferentes.

El presidente de la Diputación de Sevilla ha recibido hoy en la Sede Provincial a estos doce becarios, junto a los responsables de las entidades que los promueven y con los profesionales provinciales que ejercerán labores de tutoría con respecto a ellos.

Villalobos les ha dado la bienvenida, les ha deseado suerte en la labor que inician y ha intercambiado con ellos y con sus tutores impresiones sobre los nuevos cometidos que abordarán en este periodo, en las distintas áreas de la Corporación hispalense, cometidos centrados en trabajos de apoyo administrativo.

La Diputación retoma así un programa centrado en proporcionar experiencia laboral a personas con diferente capacidad intelectual, a través de una convocatoria pública a la que, en esta edicion, han concurrido diez entidades sin ánimo de lucro, con posibilidad de proponer los currículums de varias personas cada una de ellas.

El perfil de los becados y becadas se centra en un arco de edad entre los 18 y los 35 años, con el certificado de escolaridad o programas de cualificación inicial en su haber, y habilidades sociales acreditadas desde las entidades promotoras, para que desarrollen su labor en la Diputación durante un año, prorrogable a un segundo.

Además, la Diputación complementa este programa con una iniciativa similar en colaboración con los ayuntamientos de la provincia, a través del Plan Concertado de Servicios Sociales, que hará posible que otros 160 becados puedan realizar sus prácticas en los consistorios que así lo soliciten, a través de sus programas comunitarios.